Las caries en la infancia temprana son una enfermedad altamente prevenible pero sin embargo sigue siendo muy común. Según los expertos se debe al difícil acceso a los servicios odontológicos y sobre todo a la desinformación. En este artículo se explicará cómo funcionan las caries en los niños y cómo podemos prevenirlas. Tenemos otro artículo en nuestro blog si deseas aprender como prevenir las caries en adultos.
Las caries infantiles tempranas (CIT), también conocidas como «caries de biberón» o «caries de biberón nocturno», son un problema dental que afecta a niños menores de cinco años. Este término se refiere a la presencia de caries en la primera infancia, y su denominación está ligada al uso prolongado del biberón, así como a la edad específica de los niños afectados.
La Asociación Americana de Odontología Pediátrica identificó por primera vez esta enfermedad en 1962. Es importante destacar que las CIT son causadas principalmente por bacterias específicas, como Streptococcus mutans y Streptococcus sobrinus, las cuales se alimentan de azúcares presentes en la boca y producen ácidos que corroen el esmalte dental. Esta corrosión comienza como pequeñas manchas blancas o marrones en la superficie de los dientes y, si no se trata a tiempo, puede avanzar hasta alcanzar la raíz del diente.
La transmisión de estas bacterias puede ocurrir de diversas maneras, siendo el contacto directo una de las más comunes, como soplar la comida del bebé antes de dársela o a través de besos.
Es crucial comprender que las CIT pueden tener consecuencias más allá de la salud dental. Entre estas se incluyen dolor generalizado, riesgo de otras infecciones, formación de abscesos, dificultad para masticar, problemas gastrointestinales, alteraciones en el sueño y complicaciones en el desarrollo del habla debido al dolor asociado.
En casos severos, los niños afectados pueden requerir la extracción de los dientes afectados. Este proceso no solo es costoso, sino también complicado, ya que muchos niños no pueden permanecer con la boca abierta durante periodos prolongados, por lo que puede requerirse anestesia general. Además, la pérdida prematura de dientes de leche puede influir en la alineación de los dientes permanentes, provocando maloclusiones o posiciones dentales inapropiadas.
Las causas de las caries en niños son multifactoriales y pueden variar según diversos factores. Además del contacto directo con bacterias causantes de caries, como Streptococcus mutans y Streptococcus sobrinus, hay una serie de factores que influyen en la probabilidad de desarrollar caries, especialmente las caries infantiles tempranas (CIT).
Entre los factores que contribuyen al desarrollo de caries se encuentran las diferencias culturales en las creencias sobre el cuidado dental, la alimentación inapropiada durante el embarazo y la infancia temprana. La falta de acceso a la atención odontológica y la escasa educación sobre la salud dental en la primera infancia. El uso prolongado del biberón y chupetes también puede aumentar el riesgo de caries, ya que facilitan la acumulación de comida en los dientes.
Además de la higiene dental adecuada, la dieta juega un papel crucial en la prevención de caries. El consumo excesivo de azúcares y carbohidratos altamente fermentables proporciona un ambiente propicio para el crecimiento acelerado de las bacterias causantes de caries.
También se ha observado una correlación entre la higiene bucal deficiente en los padres y la aparición de caries en los niños, lo que subraya la importancia de establecer hábitos de higiene oral desde una edad temprana.
Por tanto, es fundamental comenzar a cuidar la salud dental de los niños desde la aparición del primer diente, asegurando una adecuada higiene bucal y una dieta balanceada que limite el consumo de azúcares y carbohidratos fermentables.
Función de masticación: Los dientes de leche permiten a los niños masticar adecuadamente los alimentos, lo que es crucial para una adecuada nutrición y desarrollo.
Desarrollo del habla: Los dientes de leche desempeñan un papel importante en el desarrollo del habla, ayudando a los niños a pronunciar correctamente los sonidos y palabras a medida que aprenden a hablar.
Espacio para los dientes permanentes: Los dientes de leche sirven como guías naturales para los dientes permanentes que vendrán más tarde. Mantener los dientes primarios sanos y en su lugar adecuado ayuda a garantizar un espacio adecuado para los dientes permanentes y a prevenir problemas de maloclusión o apiñamiento en el futuro.
Autoestima y confianza: Una sonrisa saludable contribuye a la autoestima y la confianza en sí mismo de un niño. Cuidar los dientes de leche desde una edad temprana inculca hábitos de higiene bucal que pueden durar toda la vida y promover una sonrisa saludable en el futuro.
Prevención de caries y enfermedades dentales: Los dientes de leche son susceptibles a las caries y otras enfermedades dentales, al igual que los dientes permanentes. Cuidar adecuadamente los dientes de leche mediante la higiene bucal regular, una dieta saludable y visitas periódicas al dentista ayuda a prevenir la aparición de caries y otras enfermedades dentales.
En primer lugar, se recomienda difundir información sobre el cuidado bucal en la primera infancia, especialmente entre los padres o tutores. Las clases prenatales representan una oportunidad óptima para que los odontólogos impartan charlas, ya que los padres suelen estar receptivos en estos escenarios.
De acuerdo con esto, los profesionales en odontología infantil sugieren iniciar la limpieza bucal incluso antes de la aparición del primer diente. Para limpiar las encías, se recomienda utilizar una gasa o un algodón húmedo, lo cual debe hacerse al menos una vez al día. Una vez que aparezca el primer diente, se debe usar pasta dental con fluoruro en un cepillo de dientes para bebés, dos veces al día. Además, cuando haya contacto entre dos dientes, se debe comenzar a utilizar seda dental. Actualmente, la lactancia por largos periodos de tiempo no se ha identificado como un factor de riesgo.
Las caries infantiles son un problema que se puede abordar fácilmente con el cuidado adecuado y la información apropiada. Por lo tanto, es crucial el papel de los odontólogos en la educación antes, durante y después del embarazo.
Cuidar los dientes de leche es esencial para garantizar una buena salud bucal, un desarrollo adecuado y una sonrisa saludable en la infancia y en el futuro. Los hábitos de higiene bucal establecidos durante la niñez temprana pueden tener un impacto significativo en la salud bucal a lo largo de la vida.
Todo el contenido de este artículo es de carácter orientativo. Esperamos que te resulte útil la información y recuerda siempre consultar con tu odontólogo. Si aún no tienes odontólogo para tu familia te recomendamos leer nuestra Guía sobre como elegir un buen dentista. Luego te invitamos a visitar nuestra página web y visitar la categoría de Odontología Infantil.
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