Todo acerca del Mal Aliento
¿Qué es el Mal Aliento?
El mal aliento, médicamente llamado halitosis, puede ser el resultado de malos hábitos de salud dental y puede ser un signo de otros problemas de salud. También puede empeorar por los tipos de alimentos que come y otros hábitos de estilo de vida poco saludables. En este artículo aprenderás que medidas de prevención existen y sus posibles causas. Siempre recuerda pedir consejo profesional de tu odontólogo particular.
Los alimentos y el mal aliento
Toda la comida que se ingiere por la boca comienza su descomposición allí mismo gracias a la saliva y masticación. Además, los alimentos se absorben en el torrente sanguíneo y se trasladan a los pulmones, lo que afecta el aroma del aire que exhala.
Si come alimentos con olores fuertes como ajo o cebolla cruda esto producirá un mal aliento natural. Este aroma no se irá con el cepillado y el uso de hilo dental, incluso el enjuague bucal, simplemente será escondido temporalmente. El olor no desaparecerá por completo hasta que los alimentos hayan sido expulsados de su cuerpo. Otros alimentos comunes que pueden causar mal aliento incluyen:
- Diferentes tipos de quesos y lácteos
- Pastrami
- Algunas especias y condimentos fuertes
- Bebidas azucaradas
- Bebidas alcohólicas
Del mismo modo, las personas que realizan dietas estrictas bajas en carbohidratos pueden tener mal aliento por las alta producción de cetonas. Cuando su cuerpo descompone la grasa, el proceso libera estás sustancias químicas que pueden darle un olor desagradable a su aliento.
¿Por qué los malos hábitos causan un aliento desagradable?
Si no se cepilla los dientes ni usa hilo dental todos los días, las partículas de alimentos pueden permanecer en la boca y promover el crecimiento bacteriano entre los dientes, alrededor de las encías y en la lengua. La abundancia de bacterias en su boca provoca un mal aliento. La gingivitis causada por una mala higiene dental también puede causar mal aliento.
Si se utiliza dentadura postiza debe extremar la higiene ya que ocurre lo mismo que en la boca. Si quedan alimentos en su superficie las bacterias proliferarán generando así un aliento desagradable.
Fumar o masticar productos a base de tabaco también puede causar mal aliento. Además de manchar los dientes, reducir la capacidad para saborear los alimentos e irritar las encías.
¿Qué problemas de salud están asociados con el mal aliento?
El mal aliento persistente o el mal sabor de boca pueden ser una señal de advertencia de enfermedad de las encías (periodontal). La enfermedad de las encías es causada por la acumulación de placa en los dientes. Las bacterias hacen que se formen toxinas, que irritan las encías. Si la enfermedad de las encías continúa sin tratamiento, puede dañar las encías y la mandíbula.
Otras causas dentales del mal aliento incluyen aparatos dentales mal ajustados, infecciones por hongos en la boca y caries.
La sequedad bucal también genera mal aliento porque la saliva ayuda a limpiar la boca y a neutralizar los ácidos producidos por las bacterias. Al tener la boca seca esto impide este proceso natural. La sequedad bucal puede deberse a cuando el paciente respira por la boca, el consumo de ciertos medicamentos o simplemente por no beber suficiente agua.
El estrés y la ansiedad también pueden causar sequedad bucal y aumentar la producción de compuestos que causan mal olor en la boca.
¿Qué se puede hacer?
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En la mayoría de los casos, su dentista puede tratar la causa del mal aliento si esta fuese por una carie o por placa bacteriana. Si el olor se debe a una enfermedad de las encías, por ejemplo, su dentista puede tratar la enfermedad o derivarlo a un periodoncista, un dentista que se especializa en el tratamiento de las enfermedades de las encías.
Si su dentista determina que su boca está sana y el olor no es de origen oral, es posible que lo remita a su médico de familia o a un especialista para determinar la fuente del olor y el plan de tratamiento. Puede repasar una lista de sus medicamentos y alimentos con ellos para ver si alguno de ellos podría estar contribuyendo al problema. Consulte con su médico de cabecera.
¿Cómo se diagnóstica el mal aliento?
El diagnóstico del mal aliento, o halitosis, generalmente implica una combinación de métodos clínicos y de evaluación.
Un dentista o médico puede realizar una evaluación clínica completa de la cavidad oral, incluyendo la inspección de los dientes, encías, lengua y tejidos circundantes en busca de signos de enfermedad dental, infección o inflamación que puedan contribuir al mal aliento. El profesional de la salud puede realizar preguntas sobre la historia médica y dental del paciente, incluyendo hábitos de higiene bucal, consumo de tabaco, dieta, uso de medicamentos y cualquier síntoma relacionado.
Se puede realizar una evaluación del aliento para detectar la presencia y gravedad del mal aliento. Esto puede incluir pedir al paciente que exhale en la mano o en un dispositivo especializado para detectar el olor. Se pueden realizar pruebas específicas para medir la cantidad de gases sulfurosos presentes en el aliento, los cuales son producidos por bacterias en la boca y pueden contribuir al mal aliento. Estas pruebas pueden realizarse mediante dispositivos portátiles o en el consultorio del dentista.
El profesional además puede hacer una evaluación de la saliva, dieta y estilo de vida. Por lo mencionado anteriormente.
Es importante que el diagnóstico del mal aliento sea realizado por un profesional de la salud capacitado, como un dentista o médico, para identificar la causa subyacente y determinar el mejor enfoque de tratamiento. Si aún no tienes un dentista particular te invitamos a leer este articulo para aprender sobre aspectos claves a la hora de elegir a tu dentista.
¿Qué productos se pueden utilizar para disminuir el mal aliento?
Para disminuir el mal olor de la boca, hay que reducir los gérmenes que los generan. Los raspadores de lengua plásticos erradican el 90% de los problemas de halitosis. Con una simple limpieza diaria de la lengua mediante un raspador o una cuchara metálica. Los raspadores de cobre son los mejores por sus propiedades antibacterianas y larga durabilidad, siendo este uno de los métodos más efectivos. Si bien existen diseños elegantes y ergonómicos, lo importante es el uso adecuado sin dañar la lengua. Utilizar como complemento un enjuague bucal antiséptico puede ayudar al proceso de eliminación de bacterias.
Todo el contenido de este artículo es de carácter orientativo. Recuerda siempre consultar a tu odontólogo de cabecera, Por tu tranquilidad, autoestima, y salud bucal. Si aún no tienes uno te recomendamos leer nuestra guía sobre como elegir un buen dentista para vos y tu familia. Luego te invitamos a visitar nuestra página web en la cual encontrarás todo tipo de servicios ofrecidos por Odontólogos en Uruguay.
